Hacer el trabajo que se deba hacer nosotros mismos, esto puede sonar algo fuerte para muchos que viven buscando formas de que otros les solucionen los problemas de su vida, pero esto es lo necesario, no solo para dejar a un lado la mediocridad, la pereza y el aburrimiento, también para lograr la satisfacción anhelada.
Escribir un mal verso depara mas satisfacción que leer un bello verso de otra persona, porque el ser humano aun si es perezoso en el fondo siempre necesitara sentirse útil, sentir que tiene una misión en el mundo, la vida carece de sentido por ello los hombres por naturaleza le dan sentido a su vida hallando algo en lo que son buenos o les gusta y haciéndolo constantemente para perfeccionar su arte y con ello su propia vida.
El ser que se acostumbra a que otros hagan todo por el, tiene muchos problemas, pero el mas grave es que con esto se aleja mas del saber quien es el realmente y los seres que no saben para que son buenos, que los diferencia de los demás y que es lo que les puede dar un toque de exclusividad, un ser que no sabe para que es bueno, pensara que no es bueno para nada y con ello su alma se ha llenar de negatividad y frustración, una frustración que es irónica porque quiere que otros solucionen sus problemas pero a la vez culpa de todo lo malo al resto del mundo.
La autorrealización no es mirar a otro y tratar de ser mejor que el, es ser cada día una versión mejor de uno mismo, si hacemos versos es lógico que los primeros que realicemos sean malos, pero ¿que tiene ese de malo? nada porque eso es el primer paso para ser mejores, a medida que hacemos lo que nos llama la atención seremos mejores en ello y en saber quienes somos, nadie nace siendo maestro en algo.
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