Nuestra percepción del mundo es la
que rige nuestra vida, por lo tanto si cambiamos esta sea para bien o para mal
nuestra vida cambiará en el mismo sentido, por
esto podemos decir que somos nosotros mismos quienes programamos que nuestra
vida sea buena o mala de acuerdo a como pensemos, hablemos y que hagamos.
Quizás la percepción que tenemos del mundo es una verdad innegable, pero si esa percepción no nos da alegría o nos ayuda a ser mejores, es mejor no creerla aun si es verdad.
Quizás la percepción que tenemos del mundo es una verdad innegable, pero si esa percepción no nos da alegría o nos ayuda a ser mejores, es mejor no creerla aun si es verdad.
Si nuestra vida no es como deseamos o
no estamos felices con esta, podemos cambiar el sentido de esta si estamos
decididos a cambiar la forma en cómo percibimos la vida, si cambiamos las
creencias, los paradigmas, nuestra actitud y cómo nos expresamos podremos darle
un toque más feliz y próspero a nuestra vida, esa es la solución a un vida en
la cual no estamos conformes, pues entre más nos percibamos estas ideas como
ciertas más influyen estas en nuestra vida y estas nos ayudaran a cambiar.
Para cambiar un paradigma o creencia
en nuestra vida solo basta con repetirnos muchas veces las cosas con las que
queremos reemplazar esos viejos paradigmas o creencias, muchas veces en la vida
tener disposición de cambiar nuestros paradigmas o creencias puede ser vital
para sobrevivir en nuestra sociedad, pues siempre el mundo está en constante
cambio y esto requiere que nosotros podamos adaptarnos a dichos cambios.
Nunca será malo disponernos a cambiar
nuestra percepción del mundo o cualquier cosa si nosotros creemos que es
necesario o que podemos mejorar haciendo esto, pues lo importante en nuestra
vida debe ser la felicidad, el amor y el triunfo en todo lo que nos proponemos
y si para esto necesitamos cambiar
nuestra percepción debemos hacerlo.A veces mentirnos a nosotros mismos no es malo, si esto nos hará mas fuertes.
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