Siempre vamos a querer algo y al
tiempo muchas veces eso que tanto deseamos se hará realidad, sin embargo hay
que tener cuidado con lo que deseamos, puede que no sea lo que de verdad
queremos o necesitamos, por eso hay que reflexionar y enfocarnos en cuanto a
las cosas que deseamos y crucialmente hay que ser específicos describiendo que
es lo que queremos.
Hace poco leyendo unas notas me
di cuenta que uno de mis deseos o propósitos que deseaba para este año se me
hizo realidad, pero no de la forma que yo quería, mi propósito se había
cumplido de una forma no esperada ni deseada por mí, quien me ayudo a realizar
ese propósito no obro mal, hizo lo que yo le dije, fue mi error el no
explicarle bien que era exactamente lo que yo quería.
Ser específicos con lo que
deseamos, nos evitara muchos problemas pues peor que un sueño o meta no se
hagan realidad es que si se hagan realidad pero que no se parezcan en nada a lo
que creíamos que iban a ser, es frustrante cuando cumples todo lo que te
propones pero todo ello nunca fue lo que esperabas y que incluso algunas veces
te hace más daño que bien.
Entre más específicos somos al
dar un mensaje menos probabilidades hay de que el receptor de dicho mensaje
malinterprete lo que deseamos expresarle, aun si el lenguaje parece fácil es
muy propenso a ser mal entendido, por eso no está demás especificar y más
cuando se trata de lograr algo que deseamos.
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