Es grandioso cuando aprendemos a
llevar la soledad, cuando le sacamos provecho, pero todo extremo es malo, asi
como el no saber estar solos nos genera dependencia a otras personas y nos hace
olvidarnos de quienes somos el estar demasiado tiempo solos nos hace olvidar la
importancia de socializar y nos hace
personas egocéntricas.
Siempre hay momentos en los que
necesitamos de otras personas, hasta los más sabios son ignorantes en muchas
cosas, los seres humanos sobrevivimos en manada, solos podemos resistir pero
somos más propensos a padecer, hay que aprender a sacar provecho de la soledad
pero también de los momentos en los que toca convivir con otros.
La soledad hace fuerte a quien la
aprovecha pero enferma a quien abusa de ella, pretender que aislarnos del mundo
nos llevara a la felicidad es tan ingenuo como pretender que nuestro ideal es
ser la imitación barata de otra persona.
Aprovechemos la soledad, pero no
seamos dependientes a la misma, necesitamos aprender que debemos ser
conscientes como individuos de que somos únicos pero que al tiempo necesitamos
de nuestra sociedad.
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