Hace poco a mi edad de 23 años aprendí a montar cicla, lo se este arte que para muchos es simple los niños lo aprenden desde antes de los 10 años, pero en mi caso no fue en mi niñez por inmadurez, por miedo, por falta de un buen maestro o por lo que sea que haya sido no aprendí, hasta hace poco aprendí, pero no fue porque otras personas me lo explicaran o porque las haya visto montando, fue sencillamente porque lo hice y aprendi.
Todos los días cuando no tenía nada que hacer cogía la bicicleta y trataba de montar, los primeros días me caia con el primer pedalazo, los siguientes al segundo pedalazo, luego cuando ya no me caia con los primeros pedalazos tambaleaba mucho, me era dificil andar derecho en la cicla, luego que controle eso tuve que aprender a controlar la velocidad y los frenos, cuando ya sentí que la manejaba bien salí a la calle a practicar y en dos ocasiones choque con dos personas que no caminaban en el andén sino en la vía y en otra raye un carro, pero por fortuna esos fueron mis únicos accidentes, luego de mucha práctica todos los días aprendí a montar cicla, muchas personas me decían cómo hacerlo pero nunca aprendi hasta que por voluntad propia cogí la bicicleta y practique.
Casi siempre los seres humanos no aprendemos algo hasta que nos toca hacerlo, nos dictan miles de clases en las escuelas, nos dicen cosas obvias y útiles pero solo hasta que nos toca hacerlas o las vivimos en carne propia las aprendemos, por ello seamos conscientes que si queremos aprender algo es bueno instruirnos de otras personas, libros e Internet pero que solo lo aprenderemos cuando hacemos el intento de hacerlo, esto es lo que de verdad nos enseña a realizarlo.
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